Desde una nueva sala de la sede de las Abuelas, ubicada en Virrey Cevallos 592, Estela de Carlotto leyó el comunicado en el que se anunciaba la recuperación de la nieta 107, junto a María Mercedes, a tres hermanas de la nueva nieta recuperada; a la abogada que llevó adelante el caso, María Esther Sanchéz y a la titular de Abuelas de Plaza de Mayo de Córdoba, Sonia Torres.
Carlotto explicó que «María de las Mercedes visitaba a su marido, quien estaba como preso común en un penal córdobes, y allí también había presos políticos detenidos clandestinamente, con los que ella se solidarizó y comenzó a sacar del penal las cartas que escribían a sus familiares».
«El 26 de septiembre de 1978, fue secuestrada, embarazada de siete meses y fue llevada al departamento de Informaciones de la Polícia de Córdoba conocido como «D2″, centro clandestino bajo el mando de Luciano Benjamín Menéndez y permaneció como detenida desaparecida hasta que recuperó su libertad en 1979», agregó Carlotto.
«El 11 de octubre de 1978, María de las Mercedes fue trasladada a la Maternidad Provincial, donde encadenada dio a luz a una niña de la que fue separada inmediatamente y fue llevada nuevamente al centro clandestino, pero sin su hija», relató la titular de Abuelas.
Al recuperar su libertad, el 7 de abril de 1979, María de las Mercedes empezó la búsqueda de su hija, que incluyó la visita a la Casa Cuna de Córdoba, los Juzgados de menores, hasta que realizó la denuncia ante la Fiscalía Federal Nº 3 de Córdoba.
Carlotto, al leer el comunicado detalló que «fue su hija Paola quien se comunicó con la Comosión Nacional por el Derecho a la Indentidad (CONADI), organismo que posibilitó la inclusión de las muestras de ADN de esta familia con el Banco Nacional de Datos Genéticos».
Luego siguió el acercamiento a Abuelas y «se constituyó como querellante ante el Juzgado Federal Nº 3, a cargo del juez Alejandro Sánchez Freytes, quien en mayo se declaró incompetente para considerar si se trataba de un delito de lesa humanidad, pero la resoliución fue apelada», indicó Carlotto.
Finalmente, la Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba ordenó el entrecruzamiento de las muestras de sangre y la joven fue citada y accedió voluntariamente a efectuarse el análisis de ADN, realizado el 5 de septiembre de 2012.
El padre de la nieta recuperada, Carlos Héctor Oviedo falleció en 1979, mientras que María de las Mercedes, presente en la sede de Abuelas, expresó que, «aún no la vi, tengo muchas ganas de abrazarla y de decirle que siempre supe que estaba viva».
El anuncio fue realizado también junto a muchos de los nietos recuperados hasta el momento, y a los diputados nacionales Remo Carlotto y Eduardo De Pedro; Elsa Oesterheld, viuda del desaparecido guionista de culto Héctor Oesterheld, y el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda.
En diálogo con la prensa, Carlotto expresó que «esta madre, viuda, quedó sola y siempre buscó a sus hija, junto a sus otras hijas, así que mi optimismo es que esta joven que es madre y puede saber lo que sentiría ella si le arrancan un hijo, va a querer saber y encontrarse con una madre que la está esperando para abrazarla».
Por su parte, Fresneda expresó que, «esto es una alegría porque recuperar esta identidad es recuperar un pedazo de la Argentina destrozada por el terrorismo de Estado, hoy hablé con la Presidenta y manifestó también su alegría porque creemos que gracias a la lucha de la Abuelas pero también a que los Derechos Humanos se han convertido en política de Estado, esto sigue siendo posible».
«Los hermanos que hoy recuperan su identidad se incorporan a un país con memoria, verdad y justicia lo que ayuda a dimensionar la gran tragedia que hemos vivido pero también dimensionar la vida con identidad, de qué amor surgimos», concluyó el secretario de Derechos Humanos.