La última jornada de declaraciones testimoniales en el juicio por el femicidio de Fátima Acevedo declararon, por un lado, quien era un hombre considerado clave para la defensa; por otro, se oyeron las descripciones del médico forense que practicó la autopsia y de peritos que trabajaron en la escena del crimen, tanto en la casa de Nicolás Martínez como en la zona del aljibe donde fue hallado el cuerpo de la víctima. Este jueves los 12 ciudadanos que integran el jurado popular tendrán un descanso luego de tres días de audiencias, este viernes volverán a Tribunales para escuchar los alegatos de las partes y luego pasarán a deliberar para dictar un veredicto.
Sobre el testigo aportado por el acusado
El testigo clave de la defensa es un policía que trabajaba en el destacamento del hospital San Martín, por lo que conocía a Martínez, que es empleado del nosocomio, y a Fátima porque iba frecuentemente a verlo cuando era su pareja. Cuando la joven de 25 años estaba desaparecida y la búsqueda se desplegaba por toda la ciudad, el agente policial había declarado en una entrevista en la Fiscalía que la había visto en la puerta del supermercado Plaza Vea a las 12.
En esa oportunidad dijo que la vio el día lunes, es decir cuando, para la Fiscalía, Fátima ya estaba sin vida porque se afirma que Martínez la mató el domingo 1° de marzo. Este testimonio apuntaba a desacreditar la hipótesis de la acusación. Pero este miércoles el policía fue a declarar al juicio y se lo notó muy nervioso. En su testimonio afirmó que vio a Fátima, pero no recordaba qué día era, y luego dijo que sabía que era un viernes. En ese caso, si era el viernes 28 de febrero, la víctima aún estaba con vida.
Pero el hombre agregó algo que sumó confusión: “Al otro día llamé al jefe de la comisaría tercera para avisarle que la había visto”. El día siguiente al viernes era sábado 29 de febrero, cuando nadie había denunciado que Fátima estuviera desaparecida, de hecho, ese día estuvo en la Casa de la Mujer de la Municipalidad. Será un testimonio controversial, que cada parte valorará para sustentar su hipótesis.
El cuerpo, a 18 metros de profundidad
Otro de los testimonios que este miércoles se escucharon en el juicio fue el del médico forense Luis Moyano, quien refirió el estado del cuerpo de la víctima cuando fue hallado en el aljibe de la zona de calle Hernandarias al final, más precisamente detrás del mercado concentrador El Charrúa. Dijo que el cadáver se encontraba a 18 metros de profundidad y habló de los efectos que la humedad y la temperatura pueden causar en el mismo. Entre estos datos y los que obtuvieron en el estudio de la necropsia practicada en la morgue judicial, apuntó información que ayuda a sostener la afirmación de la Fiscalía de que Fátima fue asesinada el 1º de marzo, y su cuerpo estuvo en ese pozo una semana, hasta su hallazgo el domingo 8.
También declaró el jefe de la División Scopometría de la Dirección Criminalística, quien refirió el trabajo realizado en la escena del crimen, tanto en las inmediaciones del aljibe como en la vivienda de Martínez, así como en el trayecto que hay entre uno y otro sitio y las dificultades para transitar por la espesa vegetación. El perito, que cuenta con una buena consideración en los Tribunales, mencionó también el relevamiento de indicios en los lugares donde trabajaron, aportando elementos importantes para la Fiscalía.
Asimismo, se destacó la declaración del jefe de la División Homicidios, Horacio Blasón, quien recordó paso a paso la investigación que desarrollaron desde los primeros días de la búsqueda de Fátima y cómo los indicios que fueron reuniendo iban orientando la pesquisa hacia Martínez.
Este jueves será la instancia final del juicio tan esperado: los fiscales Leandro Dato e Ileana Viviani, la querellante Alejandra Pérez y los defensores Sebastián Lescano y Gerardo Saint Marie, alegarán ante el jurado y le pedirán que declaren a Martínez culpable y no culpable respectivamente, publicó Uno.
