Nanay vivirá temporalmente en un recinto similar al que habitan Alondra, Coco y sus cachorros, con una porción terrestre y una acuática. Allí, podrá perfeccionar sus técnicas de pesca, adaptarse a este hábitat que es nuevo para él, y hacer su madriguera mientas espera la llegada de una hembra con el objetivo de formar una pareja reproductora y, eventualmente, un nuevo núcleo familiar.
La nutria nació en octubre de 2018 en el Parken Zoo de Eskilstuna, Suecia, donde fue bautizado con el nombre de un río del Amazonas peruano, que aún habita la especie.
Tras un largo viaje en avión, llegó a Ezeiza el 15 de abril y fue trasladado por el equipo veterinario de Fundación Rewilding Argentina hasta la Cuarentena Internacional ubicada en la Estación Biológica San Cayetano, en Corrientes, a fin de realizar los estudios necesarios para constatar que se encontrara en buen estado de salud para viajar a la Isla San Alonso, en el Parque Iberá.
Durante los casi dos meses que permaneció allí, se la alimentó con una dieta basada en peces de río de la zona como parte del proceso de adaptación a su nuevo hogar.
La bióloga Talía Zamboni, a cargo de los proyectos de reintroducción de especies en Iberá destaca que “el proyecto que se lleva adelante en Iberá es único en su tipo, nunca antes se intentó devolver a la nutria gigante a un sitio donde había desaparecido debido a causas provocadas por el hombre”.
Sebastián Di Martino, Director de Conservación de la Fundación Rewilding Argentina resalta el esfuerzo colaborativo detrás de estos proyectos. Además de trabajar en forma conjunta con el gobierno de Corrientes y la Administración de Parques Nacionales, el retorno de la nutria gigante involucra a expertos de otros países. Nanay, cuya incorporación se logró gracias al Parken Zoo de Eskilstuna y el Programa de Especies Amenazadas de la Asociación de Zoológicos Europeos, menciona que “estos animales se convierten, junto a los biólogos, veterinarios, guardaparques y trabajadores locales que cada día trabajan en Iberá para llevar adelante el proyecto, en los héroes del retorno de esta especie a Argentina”.
El Rewilding está trayendo de vuelta a la nutria gigante a la Argentina. Trae también nuevas posibilidades de desarrollo a Iberá a través del ecoturismo de observación de fauna, que es hoy una de las actividades económicas destacadas en la Provincia de Corrientes.
Magalí Longo, a cargo de los proyectos de Rewilding en la Isla San Alonso, en el Parque Iberá, mencionó que «esperamos poder realizar con Nanay un trabajo similar al que hemos hecho con Coco y Alondra, también arribados desde Europa, y que tan buenos resultados ha dado hasta el momento. Cada día, deberemos pescar una buena cantidad de peces para ofrecérselos vivos a Nanay en la laguna de su gran corral, para que aprenda a capturar su alimento. Esperamos, también, que en breve se pueda conseguir una hembra de nutria gigante para que intenten reproducirse, al igual que lo hicieron Coco y Alondra.»
Rewilding Argentina es una fundación creada para enfrentar y revertir la extinción de especies y la degradación ambiental resultante, recuperando la funcionalidad de los ecosistemas y fomentando el bienestar de las comunidades locales. Creada en el año 2010 por conservacionistas y activistas argentinos, Rewilding Argentina trabaja de forma mancomunada con el Estado nacional y los gobiernos provinciales, organizaciones conservacionistas y sociales nacionales e internacionales y filántropos argentinos y extranjeros.