El Gobierno nacional avanza en la reducción del distanciamiento de los chicos dentro de las aulas. Hasta ahora rige el protocolo aprobado en julio del año pasado, que establece que los alumnos tienen que tener una distancia mínima de 1,5 metro entre ellos, lo que obliga a dividir los cursos en burbujas y no permite que estén todos los chicos juntos dentro de las aulas, en un esquema como el de la prempandemia.
Todo esto sucede en 22 jurisdicciones, menos en Capital y Mendoza, donde los gobiernos cambiaron sus propios protocolos locales, eliminaron el distanciamiento en las aulas y ya permiten que estén todos los alumnos juntos en las escuelas, de lunes a viernes. En Entre Ríos ya se anunció que el lunes 30 de agosto “toda el aula será considerada una burbuja”, por lo cual se retomará la presencialidad plena y se dejará de lado la bimodalidad.
Distancia admisible
El ministro se reunió este lunes con los especialistas de Salud del Consejo Asesor para el Regreso a las Clases Presenciales -un organismo creado en el ámbito de su cartera- para “analizar la evidencia” que permita avanzar en la flexibilización de las distancias escolares.
La gran novedad acá es esta «distancia admisible». Todavía no está el número final, pero se mira con atención lo que se estableció en los Estados Unidos.
De todos modos, afirman, se podría dar marcha atrás, si las condiciones epidemiológicas empeoran. Por ejemplo, si se producen más contagios a partir de la anunciada circulación de la variante Delta del virus.