El sondeo además reveló que el 70% es parte de una red social y que usan internet más que nada para comunicarse con sus amigos. El 47% respondió que lo utiliza para estar informado, mientras que para el 37% es una fuente de entretenimiento, según informa hoy el diario Página/12.
La función favorita del celular fue el envío de mensajes de texto, aunque los adolescentes también señalaron en un 50% de los casos que lo usan para escuchar música y en un 49%, para comunicarse con los padres.
La posesión de teléfonos móviles crece con la edad de los chicos: en la franja de 11-12 años, tiene celular el 49%; en la de 13-14 años, el 67% y en la de 15-17 años, el 85%.
A pesar de la multiplicación de dispositivos, la cantidad de horas diarias que los chicos pasan frente a la TV sigue estable en tres horas promedio por día desde hace décadas (en los años 80 el consumo era el mismo).
Los adolescentes ven televisión para entretenerse más que para estar informados, aunque señalan confiar más en la información que brinda la TV frente a la de internet o los diarios.
Sin embargo, el cambio está en la manera en que los chicos hacen uso de estos dispositivos, ya que muchas veces utilizan más de uno a la vez o combinan actividades como mirar tele mientras estudian o escuchar música mientras está online.
Las cifras confirman algo que era, al menos sospechado: los adolescentes viven inmersos y atravesados por la tecnología.
La encuesta, realizada por la consultora Knack para el Ministerio de Educación de la Nación con el apoyo de Telecom, se llevó a cabo en 2011 e incluyó 1202 entrevistados (51% varones y 49% mujeres), de los cuales 99% van a la escuela. El 20% vive en la Ciudad de Buenos Aires, el 21%, en la Provincia y el 58% proviene del resto del país.
El sondeo arroja luz sobre las diferencias en los resultados teniendo en cuenta el nivel socioeconómico de los entrevistados.
Así, por ejemplo, el 70% respondió tener una computadora en su hogar. No obstante, mientras que un 96% de los chicos de estratos más elevados dijo tener al menos una PC en su casa, tan sólo el 25% respondió afirmativamente en los más bajos.
Una distribución similar ocurre en lo que se refiere a tener conexión a internet en casa o en la escuela. El dato no significa que aquellos chicos de familias con menos ingresos no tengan acceso a la web, ya que pueden hacerlo en locutorios y cibercafés.
El investigador del Conicet y profesor de la Universidad de Buenos Aires Luis Alberto Quevedo señala en este sentido que «las desigualdades según nivel socioeconómico son muy significativas y también el lugar de residencia marca distancias entre cada grupo social […] Hay grandes diferencias en materia de acceso a los equipamientos, a la conectividad, a la capacidad de los jóvenes de renovar sus aparatos, etcétera».
Quevedo además destaca el concepto de «pluriatención» que caracteriza a los adolescentes de hoy por su capacidad de hacer un uso superpuesto de distintos medios como tele, internet, música y otros. Según el experto, la capacidad de prestar atención a distintas cosas a la vez es una marca clave de la cultura del siglo XXI.
El estudio, además, revela las perspectivas que los adolescentes tienen sobre el futuro: un 79% señaló que al terminar la escuela secundaria quiere seguir estudiando o estudiando y trabajando. Un 59% indicó que piensa que en cinco años va a estar mejor.
Fuente: Infobae