El terrible homicidio de un niño de 10 años a manos de su padre sacudió la modorra en el feriado concordiense. Luego de mantener una fuerte discusión con su ex pareja, un instructor de artes marciales habría asesinado a su pequeño hijo para luego quitarse la vida en el gimnasio que regenteaba en una zona alejada del centro de la ciudad. 
El dramático episodio fue reportado alrededor de las 11.30 por la madre del niño, cuando se presentó en el gimnasio Gim-Tae, que regenteaba su ex pareja y padre de su hijo, Miguel Ángel Díaz. Según indicaron fuentes policiales, la mujer llegó al lugar para recoger a su hijo de 10 años y, ante la falta de respuesta a sus insistentes llamadas telefónicas y al timbre del local, acudió a un vecino para poder ingresar.
Al entrar al gimnasio, la mujer se encontró con un cuadro dramático: el cuerpo de Díaz colgaba de un andamio en la parte delantera de la propiedad y el pequeño yacía sin vida con dos disparos efectuados con un arma calibre 32, uno en la cabeza y otro en la espalda. Fuentes policiales consultadas por EL DIARIO dejaron entrever que el chico habría sido asesinado en la casa y que luego el hombre se quitó la vida en el gimnasio.
De acuerdo a los primeros datos recogidos por los investigadores policiales, el domingo, tras mantener una discusión con la mujer, Díaz se llevó a su hijo para pasar la noche con él, pero por motivos que se desconocen habría asesinado al chico para luego quitarse la vida dentro del gimnasio.
Pareja en conflicto. Díaz, de 37 años, es conocido como profesor de Taekwondo –con varios Dan de cinturón negro–, instructor de defensa personal y trabajador de seguridad privada en algunos boliches bailables de la ciudad. También la mujer se desempeñaba como seguridad en locales nocturnos.
Además, Díaz y su pareja habían montado el gimnasio multidisciplinario en calle Diamante 1.783, entre Gregoria Pérez y Guarumba, a 30 cuadras del centro, pero la relación se desgastó, al parecer, por los reiterados episodios de violencia doméstica del hombre, y terminaron separándose.
Según el testimonio de vecinos, la pareja se encontraba separada desde abril y la mujer vivía con el niño en la casa de su abuela, mientras que Díaz vivía frente al gimnasio. Allegados a la pareja manifestaron a los investigadores policiales que el domingo habían mantenido una fuerte discusión y el hombre terminó llevándose a su hijo.
El lunes por la mañana, la mujer se presentó en la casa de su ex pareja para retirar al niño, pero nadie contestaba en la vivienda y el gimnasio estaba cerrado, nadie respondía los llamados a la puerta ni el teléfono celular de Díaz. Entonces, pidió permiso a un vecino para ingresar a través de un muro lateral y, una vez dentro del gimnasio se encontró con el macabro escenario.
Si bien el cuadro parece indicar que Díaz asesinó a balazos a su hijo y luego se quitó la vida, la fiscal auxiliar Julia Rivoira prefirió no hacer conclusiones hasta tener a mano los informes de los peritos de la División Criminalística de la Policía.
Ficha personal
Miguel Díaz, de 37 años, era el dueño del gimnasio Gim-Tae, donde daba clases de taekwondo y dictaba cursos de defensa personal. En su muro de la red social Facebook el hombre reseñaba que desde enero pasado realizaba una capacitación en su especialidad destinada a personal de la Jefatura Departamental de Policía de Concordia. Además, trabajaba como guardia de seguridad en boliches bailables de la ciudad.
