Habiendo tomado conocimiento la Agente Davico de comisaría de minoridad, se comunicó de inmediato con el Juez de Familia informando de la situación, quien bajó los lineamientos a seguir.
Inmediatamente se hicieron presentes en el domicilio citado donde son atendidos por la pareja de Sandra, quien además de insultar al personal policial manifestaba a viva voz que no iba a entregarle a su hijo.
Según el diario La Calle, no obstante tratando de aplicar todas las técnicas conocidas de disuasión, no era posible lograr el ingreso ya que se mostraba cada vez más reticente. Con el paso de las horas y al ver que la situación no progresaba, fue el personal del grupo especial quienes hicieron el ingreso primario, para luego permitir que la Agente Técnica sacara al pequeño, que afortunadamente dormía tranquilamente. Finalmente, el niño fue entregado a su madre. (APFDigital)