Efectivos policiales recorrían la calle Querandíes al 4300 de la ciudad de Buenos Aires, cuando observaron a un automovilista realizando una brusca maniobra con las luces apagadas del vehículo.
Ante este accionar, los agentes de la comisaría 11ma. mediante señales lumínicas ordenaron la detención del auto para su identificación. El conductor, un ciudadano chino de 28 años, carecía de la documentación correspondiente para circular.
Mientras se labraba el acta de infracción, el chino demostraba cierto nerviosismo ante el interrogatorio por lo que los agentes de la Policía de la Ciudad requisaron el vehículo, encontrando en el mismo cinco envoltorios conteniendo una droga conocida como «La Flakka».
Esta droga, del grupo de las conocidas como sintéticas, es originaria justamente de China y contiene el componente Alpha PVP, derivada de la metilendioxipirovalerona (MDPV), también denominada como «droga caníbal».
Su efecto proporciona una «fuerza sobrehumana al que la consume» y quien la ingiere, suele presentar fuertes episodios de paranoia, ansiedad, psicosis y alucinaciones, pudiendo desencadenar en una muerte por fallo renal o cardíaco, precisaron las fuentes consultadas por la agencia Noticias Argentinas.