La selección argentina de baloncesto masculino perdió hoy por 71-64 contra Francia y le dijo adiós al invicto en los Juegos Olímpicos de Londres. El equipo dirigido por Julio Lamas, que había tenido un estreno arrasador contra Lituania, se vio superado por un conjunto que interrumpió todas sus conexiones y fue letal con los lanzamientos desde el perímetro.
El seleccionado argentino complicó así sus chances de evitar el cuarto puesto del Grupo A. Para lograrlo, ya no tendrá margen de error en sus partidos ante Nigeria y Túnez. Emanuel Ginóbili fue el máximo anotador del partido, con 26 puntos, pero su aporte no fue suficiente como para que Argentina consiguiese su segunda victoria.
La enorme tarea en el juego interior de los franceses (11 rebotes ofensivos) y el desequilibrio ofensivo de Nicolas Batum y Tony Parker (17 puntos) fueron la llave de la victoria de los galos, que habían caído en el debut contra el «Dream Team» de Estados Unidos.
La presencia de nueve jugadores NBA entre los diez titulares ya daba un indicio de la calidad del partido. Aún así, el encuentro se inició con nervios por parte de los dos equipos. Tanto argentinos como franceses sabían que una derrota podría complicar sus objetivos de evitar el cuarto puesto.
Durante los primeros dos minutos y medio, sólo Francia logró anotar un doble por medio de Batum. Una vez roto el maleficio, Argentina se puso en ventaja, pero los tantos respondían más a buenas jugadas personales que al trabajo en equipo. Así, los galos ajustaron la defensa y lograron un parcial de 12-0 para lograr una ventaja de 19-10.
El primer cuarto se despedía con una Argentina sin encontrar las sociedades en el juego interior y con una Francia cómoda con los tiros desde el perímetro. En el segundo cuarto, Argentina ajustó la defensa y la efectividad de los franceses comenzó a desvanecerse. Batum ya no se mostró tan desequilibrante y Parker estaba más empeñado en mover la pelota que en penetrar.
A su vez, los sudamericanos empezaron a cargar de faltas al rival, que lo terminaría sufriendo en la última mitad del partido. Durante el tercer parcial, Francia volvió a complicarse con las infracciones. A falta de seis minutos para el final, los europeos superaron el límite de faltas y jugadores como Batum o Boris Diaw permanecieron en el banquillo casi la mitad de la manga, por precaución.
Ginóbili condujo la orquesta ofensiva de un equipo albiceleste que mantuvo a cuatro de sus cinco titulares casi todo el parcial en la cancha. Aún así, Francia logró mantenerse en ventaja en el marcador, por 55-53, a base de sus rebotes ofensivos y los lanzamientos de tres. Al llegar al cuarto final, Francia cosechaba ocho triples convertidos y Argentina sólo dos.
En el último cuarto, Argentina se vio presa de la desesperación y tuvo seis pérdidas de balón, fatales ante un partido de definición tan cerrada. Pero además apareció el Parker de los San Antonio Spurs y los franceses se escaparon en el marcador y fueron efectivos en el duro marcaje en el poste bajo. Argentina intentará recuperar la alegría el próximo jueves