La iniciativa, impulsada por el oficialismo, permite reducir la pena a una persona imputada o condenada, con o sin sentencia firme, que tenga información comprobable sobre casos de corrupción, aunque en ningún caso el arrepentido podrá acceder a la eximición de prisión.
El Frente para la Victoria decidió acompañar la votación luego de que el oficialismo aceptara una modificación en el proyecto, que consistió en eliminar la figura del «colaborador eficaz», según la cual el colaborador podía ser alguien ajeno al proceso penal en cuestión.