La autopsia al cuerpo de Noemí Guadalupe Suárez, la docente de 51 años asesinada en Cerrito, confirmó que la muerte se produjo por “apuñalamiento”. Los forenses detectaron “30 cortes profundos”, varios de ellos en el cuello. Asimismo, establecieron que dos profundas puñaladas en el pecho resultaron letales, puesto que afectaron “zona vitales, sobre todo el corazón”, informaron en La Voz.
Asimismo, los profesionales corroboraron que la muerte dataría de 12 horas anteriores al momento en que se dio intervención a la Policía, es decir que el crimen se habría producido en horas de la mañana del domingo.
Suárez fue hallada con cortes en el cuerpo, en su casa de calle Lavalle al 800 en la localidad de Cerrito. Según se informó a Elonce, se desempeñaba como miembro del equipo directivo de la Escuela Primaria N°68 “Hernando Arias de Saavedra” de Hernandarias. Por el hecho de sangre, detuvieron a quien había sido su pareja, Oscar Bertuni, de 54 años.
El hombre es padre de cuatro hijos y ella, de tres. La pareja solía frecuentarse, pero el vínculo, en el último tiempo, no habría estado en los mejores términos y por eso se sospecha que la ruptura de esa relación haya sido el desencadenante de la tragedia.
Según los primeros testimonios recabados en el marco de la investigación, las amigas y uno de los hijos de la docente dieron cuenta de lo complicado que se habría tornado la relación, con episodios de discusiones y ciertas actitudes obsesivas de parte del hombre hacia ella, y según se presume, un vínculo que la mujer no habría querido continuar haya podido haber sido el desencadenante de una actitud violenta por parte del hombre.
Otra de las hipótesis que se barajó en el inicio de la investigación apuntó a la posibilidad de un asalto, aunque desde la Policía aseguraron que, en principio, no habría elementos que respalden esa conjetura.
Fuente: Elonce.com