La incubadora de empresa tiene como objetivos contribuir en la formación de nuevas empresas a través de la incubación de proyectos y planes de negocios; acelerar el desarrollo y maduración de emprendimientos y/o empresas informales y/o incipientes, exponiendo todo su potencial a fin de disminuir sus posibilidades de fracaso; ofrecer al emprendedor un ambiente favorable para el desarrollo y consolidación de la empresa; propiciar la interacción Estado-Universidad-Industria; favorecer el desarrollo regional y promover la cultura emprendedora y la competitividad empresarial.
Con esta herramienta, se pretende promover la investigación científica y tecnológica a partir de la transferencia de los resultados de las investigaciones al medio socioproductivo y la incubadora de empresas es un espacio ideal para la formación de recursos humanos que aporten al desarrollo del conocimiento y la concreción de proyectos con base tecnológica.
En tal sentido, Schepens afirmó que “el gobierno provincial pone el acento en todos los proyectos que se vinculan directamente a la industrialización de la producción primaria. Hay sectores que crecieron mucho en los últimos años, como son las cadenas avícolas y la producción de cerdos entre otras. Hoy tenemos que incorporar las energías renovables que se complementan con el perfil de provincia con una economía sustentable y amigada con el ambiente”.
El decano de la facultad de Ciencias Económicas explicó el trabajo realizado en los dos años de gestión, desde que se puso en marcha la incubadora y sostuvo que “se intenta, desde el asesoramiento técnico, poder dar respuesta a las iniciativas que son de interés regional. Se apunta a respaldar a los alumnos de los últimos años de las carreras universitarias y tecnicaturas que se dictan en la provincia, orientadas a investigación y desarrollo con base tecnológica”.
“Es nuestra intención trabajar en forma conjunta con el gobierno provincial y desde allí articular el respaldo a los emprendimientos que se encuentran dentro de los lineamientos que tiene la provincia”, afirmó Sabella.
El decano también le informó al ministro que esperan contar con información de las nuevas líneas de financiamiento del gobierno nacional para poder retomar alguna de las iniciativas de emprendedores que están a la espera de los recursos que se discontinuaron a partir de diciembre de 2015. Esos recursos son vitales para la continuidad de los proyectos que se encuentran en etapa de desarrollo. La incubadora respalda con asistencia de equipamiento y la búsqueda de espacios de mercados para los proyectos que lleva adelante los emprendedores.
Por su parte, el subsecretario de Industria de la provincia, Mario Acuña, también presente en el encuentro, remarcó que “otro de los segmentos a los que se dará respaldo desde la Incubadora, son los emprendimientos productivos de base familiar. Estos emprendimientos, que en muchos casos son el único sustento económico para sus hacedores, generan un fuerte impacto local y vinculan la política provincial con los municipios, apuntalando la demanda genuina que debemos respaldar”.
Si bien la Incubadora tiene espacio físico en la sede de la facultad de Ciencias Económicas, la idea es respaldar técnicamente a los proyectos en origen, en su espacio local, para que el emprendedor proyecte su futuro en donde nació la iniciativa y para que se desarrolle en ese ámbito.
Participaron de la reunión, además de los mencionados, el secretario de Producción Primaria, Martín Barbieri, el director de Industria y Parques Industriales, Ricardo Armocida y el representante de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación, Hernán González.