«Tal vez dentro de una semana o diez días tengamos novedades.
Estamos trabajando en un programa que nos permita cumplir con los
objetivos, que incluya una tarifa social» para quienes no pueden
afrontar los aumentos, sostuvo el funcionario.
Según había anticipado Aranguren el mes pasado, los hogares de
menores recursos van a tener un «block de consumo» de 150
kilowatts por hora por mes gratuito.
En declaraciones radiales, Aranguren evitó dar precisiones
sobre cuál será la envergadura de la eliminación de los subsidios:
«Sería imprudente dar un número sin explicarlo adecuadamente».
Con la eliminación gradual de subsidios (que benefician solo a
quienes residen en Capital y Gran Buenos Aires) el Gobierno busca
atender necesidades de las distribuidoras de la región -Edenor,
Edesur, Gas Natural Fenosa y Metrogas- que recibieron aportes
especiales del Estado en los últimos años.
Pero, al mismo tiempo, poner freno al incremento de los
subsidios, una de las claves del abultado déficit fiscal que
registran las cuentas públicas, que el propio Gobierno calculó
cercano al 6%.
Por otra parte, el ministro aseguró que este jueves «es un día
de alta demanda. Por la tarde estaremos orillando los 24 mil
megawatts», por lo cual reconoció que «los cortes (del suministro
eléctrico) van a seguir».
Además, recordó que «decretamos la emergencia energética
porque el tiempo que nos va a llevar resolver esta situación se
extenderá por ese lapso. Reconocemos una realidad y vamos
trabajar duro para poder modificarla».
Según lo dispuesto por el Poder Ejecutivo, la emergencia se
extenderá hasta el 31 de diciembre de 2017.
NA.
