Las consecuencia de la crisis económica en la zona euro continúan deteriorando el empleo en Francia, donde hoy el Ministerio de Trabajo anunció que por decimoctavo mes consecutivo creció el número de desempleados alcanzando el 10,2%, el nivel más alto en los últimos 15 años.
“Esta secuencia negativa de las cifras del desempleo refuerza nuestra determinación para invertir esta curva de aquí al final del año próximo”, afirmó un comunicado del Ministerio de Trabajo que agregó que “la degradación del trabajo continúa por decimoctavo mes”.
Sumando todas las categorías de inscriptos en las oficinas del Pole Emploi, el ente oficial francés que registra a los desocupados y los asesora para que hallen trabajo, el desempleo concierne a casi 5 millones de personas, lo que equivale al 17,2% de la población activa.
No obstante, sindicatos y asociaciones de desempleados que discuten las cifras oficiales -por solo contabilizar a quienes están inscriptos en el Pole Emploi- afirman que más de 6 millones de personas no tienen trabajo en Francia.
Pese a estar menos afectada que España o Grecia (donde el desempleo supera el 25%) por su fuerte estructura social, el impacto de los despidos debido a la crisis económica es por demás importante en Francia, especialmente en el sector industrial.
Al igual que en la mayoría de los 17 países que integran la zona euro, son los jóvenes que ingresan al mercado de trabajo los más afectados.
Hasta el tercer trimestre de 2012, el 22,7% de los franceses menores de 25 años se encontraba desempleado, según informó recientemente el Instituto Nacional de Estadística y de Estudios Económicos Insee.