Las fuertes precipitaciones registradas a partir de la madrugada de este miércoles ocasionaron algunos inconvenientes en distintos puntos de la ciudad de Paraná, motivo por el cual se puso en funcionamiento el dispositivo de emergencia a cargo de la Junta Municipal de Protección Civil.
Según datos suministrados por el área de Protección Civil, hubo más de 300 llamados solicitando colaboración en domicilios de la capital provincial. Las mayores demandas se dieron en barrios Arenales, Yatay, Santa Rita, Bajada Grande, Los Hornos, Milla Mabel, Justo José de Urquiza, Capibá, La Toma, Mosconi 5, El Túnel, Gaucho Rivero, La Floresta, Humito, Santa Lucía, Paraná V, Güiraldes, Giacchino y Villa 351.
El secretario de Desarrollo Social, Fernando Báez, explicó el panorama en la capital provincial: “Sobre la ciudad de Paraná desde anoche a la una han caído aproximadamente 135 milímetros. La dirección de Protección Civil atendió pedidos, y por la mañana por indicación de la intendenta hubo una reunión de la Junta Municipal de Protección Civil, con todos los organismos de servicio, a la que se sumó también Policía de la Provincia y bomberos voluntarios de Paraná”, comentó el funcionario municipal.
No se registraron caídas de árboles, al igual que no se han producido voladuras de techo, por lo cual los reclamos fueron mayormente por anegamientos. Se asistió a los damnificados con colchones, alimentos, calzado y ropa, entre otros.
“En general el sistema hídrico ha respondido bien, pero hubo familias afectadas por el volumen de agua que ha corrido por calles. Se trabajó con la instalación de bombas para achicar en los lugares donde el agua no corre, y Obras Sanitarias trabajó en la reparación de la red, sobre todo porque ha habido algunos lugares hay mucha gente que tiene conexiones pluviales a la red cloacal y eso causa desbordes”, indicó Báez.
Asimismo, explicó, pese a la magnitud de la lluvia, “se evaluó como positivo el nuevo sistema de desagües, sumideros y rejillas que se instaló en varios puntos de la ciudad, programa con el que se continúa en diferentes zonas».
Las familias que necesiten asistencia pueden comunicarse telefónicamente al 103 o al 147 del Servicio de Atención al Vecino o personalmente a Carbó 945 (sede de Protección Civil). A su vez se reforzará el sistema de recolección de residuos para evitar inconvenientes.