El terremoto tuvo su epicentro 11 km al sureste de Acapulco, en el sureste de México, de acuerdo con el Servicio Sismológico Nacional.
En un primer momento, las mediciones tectónicas reportaron una magnitud de 6,9, pero luego este dato fue corregido. Hubo 92 réplicas del fenómeno, hasta este momento la más alta de 5,3 grados, según informó Martí Batres, secretario de Gobierno de la Ciudad de México.
Uno de los últimos movimientos tectónicos que se reportaron por el Servicio Sismológico de México fue de una magnitud 5.0, y se localizó a 1 kilómetro al noreste de de Acapulco.
El gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, confirmó la muerte de una persona en un pueblito que se llama Los Mogotes, en Coyuca de Benítez. “Nos están confirmando que se cayó un poste por el sismo, se le cayó encima y falleció”, informó la autoridad local.
Astudillo también indicó que en un centro comercial hubo roturas de vidrios y en el Hotel Emporio de Acapulco varios vehículos resultaron afectados por el sismo. Sin embargo indicó que el aeropuerto está funcionando sin problemas.
Astudillo agregó ante la prensa que en el puerto de Acapulco tampoco se había registrado heridos ni daños, al momento.
«Hasta el momento no se reportan daños graves», escribió por su parte, en Twitter, la alcaldesa de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, donde también se sintió fuerte el movimiento en la tierra.
«Tenemos algunos cortes de luz, pero sin novedad relevante, el metro y el Metrobús siguen funcionando», dijo a Milenio TV, Omar García, titular de la secretaría de Seguridad Ciudadana de ese distrito.
El sismo, entrada la noche mexicana -casi la madrugada argentina, también se percibió con moderación en algunas regiones del estado de Puebla y con intensidad en otras ciudades del Estado de México. Las imágenes de pánico invadieron las redes sociales.
El Servicio Sismológico de México informó que se activaron las alertas sísmicas de la Ciudad de México tras el movimiento de magnitud preliminar 6.9 grados al sureste de Acapulco, Guerrero. Minutos más tarde el organismo ajustó a 7.1 grados.
Hasta el momento se registró que el movimiento se percibió también en Michoacán, Morelos, Oaxaca y Veracruz. Aún diversas zonas de las alcaldías de la Ciudad de México registran apagones.
Adela Román Ocampo, alcaldesa de Acapulco, afirmó que fue «muy fuerte el sismo». «Este acontecimiento nos tiene preocupados, no hay daños mayores más que apagones y fugas de gas», agregó.
El movimiento telúrico provocó crisis de nervios en el centro de la Ciudad de México, cuyos habitantes tienen fresco aún el recuerdo trágico de los sismos de 7,1 grados registrado el 19 de septiembre de 2017, y el del 9 de septiembre del mismo año -fecha casi exacta al actual- que sacudieron el centro del país y dejaron 369 fallecidos, la mayoría en la capital.
Turistas hospedados en hoteles de la avenida Reforma, una de las principales de la capital, también evacuaron despavoridos sus cuartos, según imágenes televisivas. Se vio la caída de árboles y cómo se desplomaron carteles y mampostería que aplastaron autos, casualmente estacionados y sin ocupantes.
La Ciudad de México fue devastada por terremotos ocurridos en septiembre de 1985 que dejaron más de 10.000 muertos.
La palabra de López Obrador
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que el hecho se produjo en el estado de Guerrero. «Afortunadamente no hay daños mayores, piedras caídas, lo mismo que en Morelos, no hay daños en Puebla, no hay daños graves en la Ciudad de México», indicó el mandatario.
«No tenemos información sobre la pérdida de vidas humanas», completó el presidente mexicano en su mensaje casi a la medianoche de este martes. Una hora después se confirmaría la primera víctima fatal.
Tensión en hoteles y atrapados en el cablebús
La tensión se vivió en las zonas de hoteles, donde el movimiento telúrico llevó a que mucha gente quede a la intemperie esperando indicaciones. Hubo muchas crisis nerviosas y en los hoteles aplicaron sus protocolos internos de protección civil.
Según se informó, hubo una réplica en Guerrero de 5,2 de magnitud, que disparó una alerta de tsunami en las costas que la media hora fue cancelada.
«El sistema de alarma sísmica funcionó y nos dio 50 segundos para poder evacuar. Acá los protocolos se cumplen y todos salieron de inmediato. Las réplicas son algo normal en este territorio sísmico», comentó uno de los testigos.
Tras el sismo de magnitud 7.1 varias personas quedaron atrapadas en el Cablebús de Iztapalapa, el famoso teleférico de la ciudad capital mexicana, debido a un corte de energía. Según se informó, los usuarios quedaron suspendidos desde las 20:47 horas y unos 73 minutos después, el servicio se normalizó y fueron liberadas, de acuerdo a lo precisado por la jefa del gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum.
