Convertir desechos plásticos en ladrillos para construir viviendas sin costo para los usuarios. Así nació el sueño de Fabián Saieg, Leandro Lima y Leandro Míguez, los cordobeses creadores de EcoInclusión, cuyo objetivo es transformar la basura en un insumo para mejorar el medio ambiente y ayudara quienes más lo necesitan.
La iniciativa ganó el Desafío Google.org, un certamen regional que busca fomentar proyectos innovadores y con impacto social. En esta edición, que se llevó adelante en varios países en simultáneo, se presentaron más de 2.300 trabajos.
En la Argentina se tiran unas 12 millones de botellas de plástico cada día y apenas se recicla el 15 por ciento de estos desechos. De ahí que estos tres amigos pensaron que se podía utilizar ese gran volumen de basura en algo productivo.
Los jóvenes, que tienen entre 27 y 28 años, comenzaron su proyecto en 2014 en la ciudad cordobesa de Alta Gracia. «Queríamos producir algo con impacto social y ecológico», explica Saieg, en diálogo con Infobae. En un comienzo montaron una planta en Alta Gracia y la equiparon con maquinarias que adquirieron con sus ahorros.
La iniciativa la desarrollaron con el apoyo del Centro Experimental de la Vivienda Económica (Ceve) del Conicet en Córdoba y poco a poco fueron creciendo.
«Ya hay seis prototipos de viviendas constuidas con estos ladrillos en Córodoba, hicimos un comedor y estamos trabajando en otros dos proyectos comunitario. Además tenemos convenios con cuatro municipios», detalla Saieg.
Con el premio obtenido podrán ir un poco más allá en su sueño. «El objetivo ahora es crear una gran planta de reciclaje en Córdoba capital, estandarizar el modelo de reciclaje y replicarlo en distintos lugares de Latinoámerica», añade.