El ‘sana, sana, colita de rana’ ya no basta. Hoy, el dolor es una mala palabra, que la gente no concibe soportar», aseguró Marcelo Peretta, presidente del Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos (SAFYB). Los especialistas señalan que en los últimos diez años la disminución de la tolerancia al dolor fue notoria, y la adjudican a un fenómeno sociocultural.


En la misma escala, según los especialistas, dos son los dolores que la mayoría de sus pacientes colocan en el nivel 10: el de parto y el de muela. En el caso del primero, al ser consultada por este diario Claudia Negri, directora de la carrera de obstetricia de la UBA, confirmó que en los últimos años ha habido un aumento en la cantidad de mujeres que piden la inyección epidural, para hacer más leve el dolor del alumbramiento. «Se debe a un cambio sociocultural, la inyección ha tenido más publicidad del boca a boca y muchas mujeres no saben ni de qué se trata, pero saben que calma el dolor y la piden a gritos», contó la experta.