Panadero acribilló a balazos a delincuente que lo citó para arreglar “rescate” por una moto

Pasadas las 20 de anoche se produjo un incidente entre dos personas que finalizó con la muerte violenta de una de ellas, acribillada a balazos en la ciudad de Concordia. El muerto se llamaba Pedro Gómez, más conocido como “Mondongo”, quien recibió cuatro impactos de bala en distintas partes del cuerpo, aunque los que ocasionaron su muerte fueron uno que recibió en el mentón que le habría interesado el cerebro y otro en el pecho, atravesándole el corazón. 

El hecho 
Un panadero de apellido Piñeiro (39), habría sufrido el robo de su motocicleta y fue citado por Pedro Gómez, alias “Mondongo” para concertar su devolución previo pago de una suma de dinero en efectivo, que fuente habitualmente bien informadas dijeron que era de $1.500. 
El comerciante llegó al lugar a bordo de un auto. En el lugar, Gómez habría intentado asaltarlo y, siempre según las versiones circulantes, ambos se trenzaron en lucha. Luego de ese forcejeo, “Mondongo” terminó acribillado por balas de calibre .22 largo. 
El hecho ocurrió en inmediaciones de Diamante y San Martín, en cercanías de las vías del ferrocarril. 
Desde la Seccional 2ª, indicaron a El Sol que “falleció en el lugar y que esto fue constatado por la ambulancia que llegó a trasladarlo y que familiares, amigos y vecinos reclamaban porque no trasladaban al hospital, lo que a esa altura era inútil pues ya estaba muerto”. 

Antecedentes 
Gómez tenía un impresionante prontuario policial, entre el que sobresalían diversos delitos cometidos contra la propiedad y con uso de armas de fuego. Se recuerda que “Mondongo” había asaltado la Tómbola 981, ubicada en Diamante y Moulins, en compañía de otro sujeto, exigiendo a la propietaria del lugar la entrega de la recaudación, en momentos en que ingresa al local una mujer y al ver lo que ocurría salió a los gritos de la Tómbola, lo que fue advertido por un policía, quien presto intervino cuando salía corriendo “Mondongo” y su cómplice, quienes abandonan una moto con la cual habían llegado a la Tómbola y se alejan del lugar de sus malandanzas corriendo. 
Pero tal fue la mala suerte del hoy fallecido, que el móvil 838 de la Policía se encontraba de recorrida y acudió al llamado del Comando, persiguiendo a ambos ladrones. A Gómez, al ser revisado, se le secuestró lo que los policías creyeron era un arma, pero al tenerla entre sus manos, descubrieron que era una burda falsificación que ocasionó –en ese momento- la hilaridad de los efectivos que –entre ellos- decían que “Mondongo” había hecho ese asalto “con una canilla, pintada de negro”. 
Sin embargo, los vecinos, cuando la policía lo apresó con gran resistencia, arremetieron a pedradas contra los móviles policiales, gritando todo tipo de improperios a los funcionarios. 
Pero en el record delictivo de “Mondongo”, se anotaron situaciones que tuvieron a vecinos en situaciones menos proclives a felicitar su accionar delictivo, uno de ellos, conocido como Fernando, fue baleado por Gómez, en Gualeguay y Aristóbulo del Valle, cuando gozaba de salidas socio laborales, de la UP3, purgando una condena por otro robo de Tómbola, en este caso de Benito Legerén. 
En la misma UP3, “Mondongo” fue lesionado gravemente por otro interno, lo que lo llevó a estar internado en el Masvernat, curándose de las heridas punzo cortantes proferidas por la “chuza” de otro interno que estuvo a punto de llevarlo a la muerte. 
El impresionante prontuario, quedará definitivamente cerrado ahora y comenzará a ventilarse la situación que determinó su temprana muerte (29), que seguramente determinará que murió en un forcejeo, mientras funcionarios policiales que han debido lidiar con el escurridizo joven, suspirarán aliviados, otros dirán que “murió en su ley”, mientras los más piadosos desearán que al final descanse en paz eterna.