Dos suboficiales de la policía de Entre Ríos fueron protagonistas de una acción que permitió salvarle la vida a un niño de tres años. Se trata de Sebastián López y Emanuel Cardozo, quienes cumplen funciones en la Comisaría Segunda de Gualeguaychú, con el grado de Sargento.
Cardozo precisó que el miércoles cuando efectuaban una recorrida habitual por el barrio, fueron advertidos por una mujer sobre un menor ahogado por la supuesta ingestión de leche.
«Con los conocimientos básicos que tenemos de RCP el chiquito fue reanimado, en medio de una rápida marcha que iniciamos hacia el Hospital», agregó el efectivo.
López recuerda el momento como un instante de muchísima tensión, porque «al estado del pequeño se agrega el nerviosismo de la mamá que había entrado en shock».
«Mientras viajábamos hacia el hospital hicimos masaje sobre la pancita y algunos golpecitos en la espalda buscando que despidiera lo que había tomado», sostuvo.
El primer signo positivo fue que el menor expulsó lo que le provocaba el ahogo, recuperando de inmediato la respiración y el pulso hasta allí casi nulo.
«Cuando el chico recuperó la respiración y notamos que el pulso regresaba, le pedimos a la mamá que se quedara tranquila porque todo estaba mejor» dijo Cardozo a El Argentino.
Al llegar al hospital el pequeño rompió en llanto lo que terminó de traer alivio a su mamá y a los efectivos que protagonizaron la heroica maniobra.
Ambos reconocen que a menudo se viven situaciones extremas en lugares públicos, como los boliches, las canchas o el mismo carnaval. «Es común afrontar situaciones complicadas, pero cuando hay chicos todos es especial», destacaron.
