Los casos de gripe A están aumentando en el país. Según datos del Boletín Epidemiológico Nacional, la cantidad de notificaciones de 2022 es la más alta de los últimos años. Y en este contexto, autoridades sanitarias nacionales piden extremar las medidas de prevención, entre ellas el uso del barbijo.
El reporte del Ministerio de Salud de la Nación informó que –durante las 32 semanas de este año– se notificaron 719.065 casos de enfermedad tipo influenza (ETI). La tasa de incidencia acumulada es de 1.555 casos cada 100 mil habitantes.
Es el número más alto de los últimos cuatro años. Nación aclaró que en 2020 y en 2021 prácticamente no circularon otros virus respiratorios, más allá del Sars-Cov-2. Pero informó que el total de casos registrados este año supera a los de 2018 y 2019.
En proporción, más del 99 por ciento de los casos de gripe que se analizan corresponden a la variante A. Y dentro de esta cepa predomina la variante H1N1.
“Por lo general, los últimos picos de influenza se dan en agosto. Pero este año se registraron en primavera, un poco más tarde que lo habitual”, explicó a La Voz el subsecretario de Estrategias Sanitarias del Ministerio de Salud de la Nación, Juan Manuel Castelli.
El funcionario estuvo días pasados en Córdoba para monitorear el avance de la campaña de vacunación contra la polio y el sarampión. Indicó que la población más afectada son los adultos de entre 18 a 49 años. “Es la población laboralmente más activa. Eso hace que los casos se repliquen. Por lo general, sobrellevan adecuadamente la enfermedad. Y no está teniendo impacto en la internación”, explicó.
Este año, el virus de la influenza comenzó a circular antes de tiempo. Ya en enero se reportó un brote en Mar del Plata y, en marzo, hubo subas generalizadas en todo el país. Esto tuvo que ver principalmente con el cambio en el patrón de circulación de los virus respiratorios.
Como en 2020 y 2021 prácticamente no circuló otro agente más que Sars-Cov-2, aumentó la susceptibilidad para el resto de los virus respiratorios. Las personas tuvieron una menor inmunidad frente a la gripe. En el caso de los niños, contra el virus sincicial, que provoca bronquiolitis.
Castelli recordó que las tres medidas más efectivas para prevenir los virus respiratorios también aplican para influenza A. En el caso del barbijo, si bien ya no es obligatorio su uso (salvo excepciones), el funcionario explicó: “Es una medida de protección para terceros, sobre todo cuando uno tiene síntomas y se encuentra en lugares cerrados”.
En espacios con ventilación insuficiente e instituciones sanitarias, el barbijo debe seguir sosteniéndose, indicó.
Además agregó que hay que ventilar los ambientes, para garantizar el recambio del aire, y mantener la higiene de manos.
La vacuna es una herramienta más de protección. Para la influenza, está indicada en menores de 2 años, mayores de 65, equipos de salud y enfermos crónicos.
En el caso del Sars-Cov-2, Castelli advirtió que los argentinos “bajaron los brazos” con la aplicación del refuerzo: “Tenemos solo 21.500.000 de personas que recibieron una dosis extra y 6 millones que recibieron dos”, indicó.
Castelli informó que Alemania tiene el 50 por ciento de sus camas críticas ocupadas por Covid-19. “Como había descuidado la aplicación del segundo refuerzo, ahora intensificó la medida. Es importante no esperar estar en un brote para ir a vacunarnos. El virus todavía no estableció una estacionalidad y no sabemos si no tendremos una nueva ola”, agregó.