El frigorífico de San José fue puesto en marcha ayer por el gobernador Sergio Urribarri en un acto en la planta del que participó vía teleconferencia desde Casa Rosada la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. “Este modelo sigue teniendo en su mercado interno y en la demanda de valor agregado su gran fortaleza”, expresó la jefa de Estado ante los trabajadores, que el lunes retomaron las tareas de faena.
La Presidenta envió “un saludo muy grande a los 90 trabajadores y trabajadoras que hoy abren una fuente de esperanza para cada uno de los integrantes de esa fábrica y también para el pueblo porque, en definitiva, cada fábrica que se cierra es un sueño que se va, una ilusión que se pierde y debe ser lo más feo que hay”, reflexionó. “Nosotros luchamos tanto y con tanta fuerza para que no se cierren fábricas, para que se llegue siempre al entendimiento entre el Estado, los trabajadores y el sector empresario, que son las tres patas esenciales para que funcione una Nación, compuesta en definitiva: por lo público, lo privado y los que trabajan”, añadió.
Fortaleza. Durante el acto, la mandataria inauguró formalmente la apertura de cuatro empresas, entre las cuales estuvo el frigorífico de San José en Entre Ríos –que había cerrado en diciembre de 2010–, junto a una fábrica de vidrios en Avellaneda, una empresa de aluminio en La Plata y en Chivilcoy una fábrica de pastas.
“En este mundo, estar haciendo todas estas cosas hoy tiene que ver con que el modelo sigue teniendo en el mercado interno, en la demanda agregada, su fortaleza”, destacó Fernández de Kirchner.
Cada una de las empresas fueron puestas en marcha con créditos del Bicentenario. En ese sentido, la mandataria recalcó: “Quien más confía en los empresarios es el sector público y no la banca privada, ya que es el Banco Nación el que más les presta”.
Esperanza. Urribarri, acompañado por el intendente vecinalista Pablo Canalis, el vicegobernador José Cáceres, y gran parte de su gabinete, además de intendentes de localidades vecinas y legisladores, empresarios de la zona, representantes del sindicato de la carne y trabajadores, describió ante la Presidenta a la jornada como “un día de júbilo y de esperanza, aquí en San José y en la región para toda la actividad”.
Destacó que se “reabre esta fuente de trabajo gracias a la labor mancomunada de los gobiernos nacional y provincial, del sector privado, la municipalidad y los sindicatos”. Luego, recordó que en septiembre de 2010, cuando recibió la información del cierre, por parte del intendente, la Presidenta “hizo que funcionarios como Guillermo Moreno y Débora Giorgi se pusieran al frente para que hoy vivamos este momento de felicidad”.
El gobernador aseguró que la reapertura del Frigorífico San José “es el fiel ejemplo del rescate del trabajo genuino de los entrerrianos” y explicó que esta es “la primera etapa de un proyecto que ocupa a partir de hoy a 90 trabajadores, hombres y mujeres de este pago a los que les volvió la esperanza y, como otros tantos, que tienen la esperanza de que algún día, esta actividad frigorífica, creciendo, siga generando puestos de trabajo”.
Solución. El intendente Canali recordó que al primero que llamó con la noticia del cierre de la planta fue al gobernador. “Le dije que habían quedado 450 familias en la calle y me pidió que me quedara tranquilo, que nos íbamos a abocar al tema y alguna solución le íbamos a encontrar”, rememoró. “Llegar a este punto me llena de orgullo”, añadió, antes de agradecer al ministro de Producción, Roberto Schunk, al senador Oscar Arlettaz, y al sindicato de la carne.
Por último, el presidente de la Procesadora Ganadera Entrerriana SA, Eduardo Marsó, destacó “la fe y la confianza que el gobernador nos transmitió para realizar este proyecto junto al ministro de Producción, amigos productores y demás empresarios de la región. Estamos muy contentos de haber logrado su apoyo para concretarlo y seguir avanzando”.
Alegría y emoción
Trabajadores y lugareños manifestaron su “alegría” y “emoción” al ver nuevamente funcionando la planta. El jefe de planta del frigorífico, Mario Bidal, expresó: “Es fruto del esfuerzo que hicieron muchos, entre ellos el gobierno nacional, provincial y municipal, el sindicato, y los empresarios de la zona”. Luego, agregó: “Para nosotros es una enorme alegría trabajar nuevamente y estar todos juntos”. Un empleado de la planta, Mario Benítez, que comenzó a trabajar en el frigorífico en 1981, dijo: “Ahora es una nueva esperanza para nosotros. El frigorífico es mi segunda casa y siento mucha emoción”. Respecto de la reapertura, comentó que “la gente del pueblo está ansiosa”. Y sobre la primera faena, relató que fue una “fiesta” y que “había mucha alegría”. Fue el lunes y se faenaron 30 animales.
Fuente: El Diario.
