El intendente de la localidad santafesina de San Lorenzo, Leonardo Raimundo, amplió este lunes la denuncia ante la Justicia Federal por las quemas de pastizales en las islas del río Paraná, que perjudican el medio ambiente y salud de pobladores de esa jurisdicción.
La denuncia de Raimundo en la Justicia Federal de Paraná, está dirigida “contra los productores responsables de los incendios y las autoridades encargadas de controlar la aplicación de la normativa vigente”, informó el intendente santafesino. Entre sus fundamentos, la presentación puntualiza “los serios daños que esta práctica de los incendios en las islas produce a la salud y al medio ambiente”.
Raimundo intimó nuevamente al gobierno entrerriano a intervenir “de forma inmediata” para impedir una práctica que recrudeció en los últimos días, causando “problemas respiratorios a los vecinos y disminución de la visibilidad en la vía pública”.
En la presentación, detalló los daños ocasionados por esos actos, que según puntualizó “podrán tipificarse como delitos penales de acción pública perseguibles de oficio”.
Y agregó a Telam que “se ha detectado en el espacio aéreo la presencia de gran cantidad de humo y cenizas a causa de los incendios producidos intencionalmente en los pastizales en el Alto Delta del río Paraná, frente a nuestra ciudad”.
Las quemas, aseguran las autoridades municipales, perjudican a la fauna ícticola de la cual vive gran número de los habitantes de nuestra ciudad y zonas aledañas, la flora, los pobladores ribereños, los transeúntes, los turistas, y los habitantes de San Lorenzo.
Por último, Raimundo sostuvo que es de “marcada urgencia” constatar si los incendios fueron intencionales, como también “individualizar a sus responsables para someterlos al proceso penal correspondiente”.
Desde el último sábado, nuevos focos de incendios se registraron en las islas entrerrianas. El humo afectó nuevamente a pobladores de localidades y ciudades como San Lorenzo, Rosario, Villa Constitución, Empalme, Theobald, Pavón y Rueda.
Es de destacar que hacia mediados de junio pasado y ante los 3.000 focos de incendio en estas zonas, el Ministerio de Ambiente de la Nación declaró la emergencia ambiental en la zona que estableció la prohibición de toda quema en la zona durante los próximos 180 días.
Entre las especies amenazadas en la región del delta del Paraná está el ciervo de los pantanos, en peligro de extinción, el bosque fluvial mixto, constituido por especies como el sauce criollo, el aliso de río, el canelón y el laurel entre otros, típicos de las islas de la porción superior del delta en las cercanías de las ciudades de Diamante y Rosario.
Frente a esa situación el ministro Juan Cabandié informó que se pusieron a disposición equipos de detección de focos de calor para prevenir futuros incendios y se enviarán dispositivos para medir la calidad del aire.
Las acciones para controlar los focos ígneos estuvieron a cargo del Ministerio de Seguridad de la Nación, el que dispuso dos aviones hidrantes, a los que se suma un helicóptero de Prefectura Naval Argentina, y en las próximas horas, otro de la Policía Federal.
En tanto, la Administración de Parques Nacionales, que depende del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, colaboró con las fuerzas de seguridad en el combate del fuego, con un equipo especial de 28 brigadistas equipados con vehículos, herramientas de mano y motobombas, que pertenecen a los parques más próximos a la zona afectada.