El ministro de Educación, Nicolás Trotta, reiteró su compromiso de implementar un esquema de presencialidad en el dictado de clases a partir del ciclo lectivo que comenzará el 1 de marzo, aunque insistió en que el regreso a las aulas será «escalonado», «con alternancias para sostener el distanciamiento social» y con una «evaluación cotidiana» de la situación epidemiológica.
En Tierra del Fuego, y como parte de un recorrido que incluye la mayoría de las jurisdicciones del país, Trotta habló de un retorno paulatino de la actividad en las escuelas que sea «cuidado» y «seguro», porque «la pandemia no se ha superado y tenemos que mantener los controles», señaló.
En esa línea, el titular de la cartera educativa confirmó que este año se cumplirán los 180 días de clases «siempre dentro de este proceso de presencialidad y no presencialidad», con decisiones adoptadas «dentro de la mínima unidad geográfica» y considerando «las notorias desigualdades que todavía sufre el país».
El ministro recordó que, con el fin de diagnosticar la situación del sistema educativo, ya visitó las 6 provincias del noroeste (NOA) las 4 de noreste (NEA) y las 3 de la región de Cuyo, además de varias de las provincias patagónicas como Santa Cruz y Tierra del Fuego.