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Un hombre se enojó con sus dos perros al encontrar la plantilla de una de sus zapatillas destruida. Ubicó a las mascotas a la par y mirándolas fijo les preguntó quién había sido el responsable. Uno de ellos, un pitbull, bajó la cabeza y demostró culpa al querer esconderse detrás de una maceta. Mientras, el otro no se alteró por la situación. «Vos sos cómplice», le dijo el dueño.
