Ambos gobernantes se reunieron ayer en Casa de Gobierno para evaluar la situación derivada de una nueva rotura del acueducto de 900 milímetros en calle López Jordán entre Darwin y Acceso Norte, que causó el corte del servicio de agua potable en varias zonas de la ciudad de Paraná.
Puntualmente, Urribarri y Osuna presentarán en el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enhosa) un proyecto surgido a partir de la actual situación para la construcción de un enlace de cañería de impulsión complementaria. En la audiencia con el titular del organismo, Lucio Tamburo, agendada para las 10, participará el ministro de Planeamiento e Infraestructura de la provincia, Juan Javier García.
Está previsto que en la oportunidad se firme un convenio específico para la ejecución de la obra, para la cual es necesaria una inversión no menor a los 15 millones de pesos.
ARRASTRE. “Esta acción nos permitirá saldar un problema que viene de arrastre, que requiere una atención que garantice la provisión permanente de agua potable en la ciudad”, indicó Osuna. Sobre la obra planificada, la intendenta explicó que consiste en la construcción de un enlace complementario que permitirá contar con una alternativa a la cañería existente.
“Se completaría un anillo de distribución no sólo en el tramo de esta rotura, sino incluyendo el funcionamiento de la planta de avenida Ramírez, que quedó en desuso, pero entendemos que mantenerla en esa situación no ayuda. Por el contrario, queremos incluirla en el sistema para que contribuya a atenuar las dificultades ocasionadas por esta rotura en particular de un caño tan importante, pero también ante cualquier otro tipo de problemas que el sistema de agua potable pueda presentar”, graficó la intendenta.
“Con la ejecución de esta obra se va a cumplir con la condición necesaria e indispensable de que todos los enlaces estén incorporados al sistema de distribución de manera simultánea”, completó.
ORIGEN. Aunque la intendenta no lo menciona, el “arrastre” al que alude tiene su origen en el momento de la construcción de la planta potabilizadora de Paraná y sus obras complementarias, entre las que se incluye, precisamente, el caño maestro de impulsión que se rompe continuamente y deja sin agua a buena parte de los hogares paranaenses.
La forma de hacer política de entonces, donde prácticamente no existía el trabajo conjunto entre municipio, provincia y Nación, explica en parte los problemas que a los vecinos los afectan hoy, ya que con el tiempo no hicieron más que agravarse.
Ahora, en días de sintonía fina entre los gobiernos local, provincial y nacional, de disposición al trabajo conjunto y de reparaciones históricas, tal vez la reunión del viernes sea el principio de una solución definitiva al problema del agua en Paraná.
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Luego de que se concretara la reparación del acueducto en López Jordán, efectuadas las pruebas del rigor, a partir de las 9 de ayer se reinició la impulsión de agua potable hacia los centros de distribución Lola Mora, Parque del Lago y tanque del Seminario. La llegada del suministro a los hogares afectados fue lenta y paulatina, tal como se anticipó desde el municipio. A última hora de ayer comenzó a normalizarse.
Fuente: El Diario.
