Para ellos no es un martes cualquiera: no tuvieron que caminar hasta la escuela ni salir a trabajar con sus papás. Tampoco necesitaron preocuparse por conseguir algo qué almorzar. Los alumnos de cuarto grado de Yohana Fucks, la maestra que le escribió la carta a Lionel Messi, recibieron un regalo especial: viajaron 11 horas desde Entre Ríos hasta San Juan para ver a la Selección.
«Un segundo puesto nos trajo hasta acá. Hoy cumplimos un sueño. Gurises felices. Gracias Lio Messi», dice el cartel que prepararon para llevar a la cancha. Yohana no puede esconder su emoción: «Quizás este viaje marque un antes y un después en su vida», le dijo TN.
Los chicos ya estuvieron en las montañas, vieron el atardecer, recorrieron la ciudad y le cuentan a cada persona que se cruzan que su lugar para el partido en el Estadio Del Bicentenario está asegurado.
La iniciativa surgió de un productor de Ideas del Sur, que junto con Canal 8 de San Juan y la ayuda de los gobiernos de Entre Ríos y San Juan los invitaron a ver Argentina vs Colombia. La maestra no sabe cómo describir lo que sienten sus alumnos, ella también está feliz. «Hoy están todos a favor de ellos. No hay ruidos de bala, ni problemas de comida, a nadie le falta nada para merendar», contó a TN.
A pesar de que la carta se viralizó, la escuela recibió muchas donaciones de gente que quiso ayudar, para las maestras este regalo tiene un sabor especial. «Es algo que llegó para recompensarlos directamente a ellos, algo que quizás no vuelvan a vivir nunca más», asegura Yohana.
Junto con su compañera a cargo del grado, Desireé, armaron un grupo de Whatsapp para compartir con las familias las fotos y que nadie se pierda este momento de felicidad. «No lo puedo sintetizar en una frase, los nenes están chochos. Es la primera vez que están en un hotel, la gente los atiende. Arreglaron su habitación porque no sabían que tenían servicio de mucama. Tampoco querían prender el aire para no gastar», cuenta.
Ellos ya están listos para ir al partido. Sueñan con que Messi vea su bandera. Disfrutan. No dejan de acordarse de los que no están. Y repiten con nostalgia: «Ojalá mi abuelo pueda verme en el estadio. Ojalá mi mamá y mi papá pudieran estar conmigo. Ojalá pudiera compartirlo con mi hermano». Yohana los escucha, manda fotos y sonríe. Les dice que es un premio por lo que mostraron a través de esa carta -«Porque ellos la inspiraron»- , aclara. También, confiesa que siente pena por tantos otros chicos que todavía están olvidados y asegura que sus alumnos «invitan a la sociedad a pensar que los sueños son posibles».