La rinitis alérgica afecta a una de cada cinco personas y en primavera se agudizan los síntomas. Consejos para minimizarlos.
Para muchas personas, la llegada de la primavera es sinónimo de alegría: se amplían las horas de sol, los días empiezan a ser más cálidos, las flores regalan sus colores, los árboles reverdecen. Pero para otras, es una época complicada, porque en esta estación empiezan a sufrir con los estornudos, goteo por la nariz y molestias varias.
La primavera empeora las condiciones de quienes padecen rinitis alérgica. En Argentina, una de cada cinco personas de entre 4 y 55 años (más de 5,5 millones) sufren este tipo de alergia, la enfermedad respiratoria y la patología alérgica más frecuente, de acuerdo al primer estudio sobre prevalencia realizado en el país, el año pasado, por la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (Aaaeic).
Según los estudios, el trabajo mostró que el árbol que más daño causa es el plátano; en la Ciudad de Buenos Aires hay unos 75.000 ejemplares, lo que representa un 15% del total.
Hay otros desencadenantes de la rinitis alérgica. Los más frecuentes son la polución, los ácaros del polvo, el moho, y el pelo de los animales.
Síntomas de la alergia en primavera
Los procesos alérgicos a nivel de la nariz pueden provocar estornudos, picor de garganta, paladar, nariz y oídos, taponamiento de nariz y mucosidad transparente. Hay casos más delicados en que se afectan los bronquios y puede presentarse tos, sensación de falta de aire, opresión en el pecho y ruidos como silbidos.
Consejos para prevenir las alergias
- Evitar salir a la calle en las horas en las que la concentración de polen es mayor, que es al amanecer y al atardecer.
- Mantener las ventanas de las casas cerradas, como así también ventanillas del vehículo.
- Evitar secar la ropa durante las horas de máxima polinización, el polen queda atrapado en la ropa húmeda.
- Es recomendable hacer una limpieza profunda semanal de la casa.
- Evitar en lo posible, salidas al campo y parques, jardines o zonas de abundante vegetación.
- El uso de lentes de sol puede reducir la irritación en los ojos y el lagrimeo.
- Mantenerse en buena forma física ayuda a que nuestro sistema inmune esté al 100%.
- Si se practica ejercicio físico regularmente, conviene hacerlo en casa o en un gimnasio, lejos de árboles y plantas.
- Tener siempre a mano los medicamentos recomendados por el alergista para hacer frente a los síntomas característicos de la alergia.
Cómo se trata
Es importante no automedicarse. Los afectados pueden concurrir al médico general o al pediatra, aunque ante casos recurrentes y/o crónicos se justifica la consulta con el especialista que realizará un exhaustivo interrogatorio y examen, brindando un diagnóstico de certeza e indicará el tratamiento adecuado para cada paciente, apunta la médica.
Los medicamentos que se prescriben para la rinitis actúan rápido y son seguros, destacan los especialistas. La enfermedad puede también inmunomodularse con vacunas contra alergenos específicos, que reducen el impacto en la salud y tienen efecto prolongado. No hay cura para la rinitis alérgica.
Para reducir el impacto de estas alergias se sugiere evitar el alcohol y beber abundante agua para favorecer la eliminación de la mucosidad. También se recomienda seguir una alimentación rica en productos frescos, como las frutas y las hortalizas, que aportan vitamina C y contribuyen al funcionamiento normal del sistema inmunológico.
Fuente: Infobae