Trabajar en turnos nocturnos representa un riesgo de salud de creciente importancia porque cada vez es más común y debido a su potencial impacto al aumentar las diferencias entre la salud de los trabajadores de más alto y más bajo estatus socioeconómico.
Ahora un nuevo estudio de la Escuela de Medicina y Salud Pública de la Universidad de Wisconsin determinó que los trabajadores que trabajan en turnos fuera del horario de 9 a 17 son más propensos a padecer sobrepeso y problemas del sueño, y también tienen más riesgo de desarrollar trastornos metabólicos, tales como diabetes, en comparación con los trabajadores que cumplen horarios tradicionales.
El trabajo se publicó en “Sleep Health”, la revista de la Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos.
“Los empleados en turnos nocturnos son particularmente vulnerables a experimentar problemas para dormir, debido a que sus trabajos requieren que trabajen de noche, en turnos flexibles, extendidos o rotativos”, explicó la investigadora principal del estudio, doctora Marjory Givens, de la Universidad de Wisconsin.
“En general, los trabajadores en turnos nocturnos son hombres, minorías e individuos con menor nivel educativo y típicamente trabajan en hospitales, líneas de producción o la industria de transportes”, añadió.
Para llevar adelante el estudio, los investigadores entrecruzaron datos de la Encuesta de Salud de Wisconsin (de 2008 a 2012), que incluyó entrevistas en hogares y clínicas y exámenes físicos. En el análisis participaron 1.593 personas, a las que se les midió el índice de masa corporal (IMC) y se determinó el estado de obesidad o sobrepeso. Además, se evaluó en 1.400 sujetos la presencia de diabetes tipo 2.
RESULTADOS
Los trabajadores de turnos nocturnos fueron significativamente más propensos que los trabajadores de turnos tradicionales a sufrir sobrepeso (47,9% contra 34,7%). También experimentaron mayores problemas de sueño tales como insomnio (23,6% contra 16,3%), cantidad insuficiente de horas de sueño (53% contra 42,9%), o excesiva somnolencia al despertar (31,8% contra 24,4%).
Dado que a los trabajos en turnos nocturnos y los problemas de sueño se los ha implicado con una deficiente salud metabólica, este estudio indagó si estos problemas del sueño pueden jugar un rol en las disparidades de salud que presentan los trabajadores nocturnos.
En efecto, la doctora Givens y sus colegas hallaron que padecer problemas del sueño estuvo asociado con presentar sobrepeso, obesidad o diabetes.
Esta asociación se mostró más fuerte entre los trabajadores nocturnos que no lograron dormir la suficiente cantidad de horas (menos de siete por día), lo que sugiere que las consecuencias adversas sobre la salud metabólica de los trabajadores nocturnos podría disminuirse parcialmente con una cantidad suficiente de horas de sueño.
“Este estudio se suma al creciente volumen de literatura que llama la atención sobre la carga de la salud metabólica que normalmente experimentan los trabajadores nocturnos y sugiere que dormir lo suficiente puede disminuir esa carga. Más investigaciones en esta área podría propiciar intervenciones de bienestar y salud en el lugar de trabajo sobre el rol del sueño para disminuir las disparidades de salud en los trabajadores nocturnos”, concluyó la investigadora.