El vertiginoso crecimiento de Conor McGregor en la UFC tras conseguir el título en un soberbio nocaut a los 13 segundos ante el brasileño José Aldo generó una repercusión inusitada, aunque no todas fueron buenas para el irlandés.
Sucede que Floyd Mayweather, el monarca del boxeo en la actualidad,relacionó dicho boom con el hecho de que McGregor sea de raza blanca.
Ante esto, como era de esperarse, McGregor, quien aprovecha cada oportunidad para sobresalir y armar su propio show, decidió no quedarse callado y se descargó en su cuenta personal de Facebook:
«No vuelvas a involucrar la raza en mi éxito de nuevo. Soy un irlandés. Mi gente ha sido oprimida toda nuestra existencia.Y aún mucho más. Entiendo la sensación de prejuicio. Es un sentimiento que se encuentra en lo profundo de mi sangre», comenzó escribiendo el flamante campeón de UFC.
«En mi familia a lo largo de la historia de la guerra hubo un tiempo en donde sólo tener el nombre de Mcgregor se castigaba con la muerte. No vuelvas a meterme en un bracket así otra vez», agrega.
«Si quieres podemos organizar una pelea sin problema. Te daré una buena proporción 80/20 bolso en mi favor visto como tu última pelea bombardeado en todas las áreas de ingresos. A los 27 años de edad, ahora la clave para este juego. El juego respuestas para mí ahora», concluye el peleador de 27 años, que parece no tenerle miedo a nada.
Lo cierto es que el desafío está planteado. Resta saber si el boxeador recoge el guante y si algún empresario con visión comienza a fogonear un evento que sería para alquilar balcones. ¿Se dará?