Una repentina suba del precio del trigo y dificultades de los molinos para abastecerse de mercadería de calidad, luego de la pobre cosecha de 2012, llevaron al secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, a recurrir a los exportadores para que suministren a los molinos el cereal que posean en stock. El objetivo apunta a evitar aumentos en la harina, el pan y otros productos del rubro.
Así lo confirmaron fuentes vinculadas con la exportación y empresarios molineros. No trascendió el volumen de trigo requerido a los exportadores. En los últimos días, los exportadores agrupados en la Cámara de la Industria Aceitera (Ciara) hicieron circular entre ellos una encuesta en la que cada operador debía informar la cantidad de mercadería disponible en cada empresa.
«Hubo charlas con Moreno para que se ofrezca más mercadería al mercado interno, porque los molinos están trabajando con poco stock y el trigo se encareció», reveló una fuente.
El año pasado, la cosecha de trigo se ubicó en 9 millones de toneladas, lo que representó una baja de 37,9% respecto de 2011. No sólo hubo menos trigo, sino que por los excesos de lluvias de fines de año y enfermedades en amplias zonas de producción quedó muy afectada la calidad del cereal. Para los molinos, la calidad es un tema central. Por falta de mercadería justamente de calidad, el trigo disponible tuvo una fenomenal suba, llegando incluso a valer más que la soja. Por ejemplo: ayer, en el Matba, el trigo para mercadería disponible marcó 357 dólares por tonelada, 19 dólares más que la soja con entrega inmediata. «Nunca en la historia se había dado esta relación», precisó Lorena D’Angelo, analista de FyO.com.
Un empresario molinero admitió ayer que había dificultades para el abastecimiento de mercadería de calidad, pero consideró que esa situación iba a ser «transitoria».
«Sabemos que esta situación va a ser momentánea y pasajera porque el trigo va a alcanzar. Generalmente los molinos tienen más stocks, pero hay nerviosismo porque se está trabajando con menos», graficó un industrial al diario La nación.
Hasta el 30 de abril pasado, los molinos llevaban adquiridos 2,2 millones de toneladas. Necesitan 5 millones para cubrir las necesidades del mercado local.
Fuente: Once