En un rincón del ring el reconocido Súper Mario Balotelli, autor de una interminable lista de escándalos de todos los colores, y en el otro su entrenador en Manchester City, el italiano Roberto Mancini, protagonista también de varios disturbios. El conjunto inglés realizaba su práctica programada cuando de pronto el DT y el delantero debieron ser separados antes de que la historia termine entre las cuerdas.
Al técnico le subió la reconocida tanada cuando Balotelli le pegó una fuerte patada a su compañero Scott Sinclair. Acto seguido… lo empujó y lo agarró de la pechera de entrenamiento al artillero. Esto, puso de mal humor al atacante y se lo recriminó abiertamente.
Por suerte, los integrantes del plantel, entre ellos Carlos Tevez, Sergio Agüero y Pablo Zabaleta, y el cuerpo técnico, llegaron a tiempo para devolverlos a sus respectivos rincones antes que todo se convierta en una verdadera hecatombe. Segundos afuera…