El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, y el director de Desarrollo del Fútbol Mundial, el francés Arsene Wenger, presentaron ante los 211 países miembro el proyecto de 700 páginas que calcula un aumento de 4.400 millones de dólares en los ingresos con el nuevo calendario.
El presidente de la AFA, Claudio Tapia, participó de la reunión que se realizó mediante la plataforma zoom. Durante las casi dos horas de exposición, la FIFA explicó los beneficios económicos que tendrá la modificación de los calendarios a partir de 2024 y la reducción del tiempo entre los Mundiales.
La FIFA argumentó que en cuatro años los ingresos crecerán hasta en 4.400 millones de dólares, lo que representa un total de 19 millones para cada uno de los países miembro.
Si se concreta el proyecto, a partir del Mundial de 2026, con el nuevo formato de 48 participantes, se cree que los ingresos de venta de entradas, derechos de televisión y publicidad pasará de 7 mil millones a 11.400 millones de dólares. También se habló de la creación de un nuevo «fondo de solidaridad» calculado en 3.500 millones de dólares para los primeros cuatro años.
Luego de la reunión, Infantino y Wenger brindaron una conferencia de prensa y allí dejaron en claro que la FIFA tiene los votos para aprobar el proyecto en la Asamblea General programada para marzo del año que viene pero que seguirán con el debate. «La mayoría se mostraría a favor (del proyecto). Nosotros queremos mejorar al fútbol y vamos a continuar con el diálogo», aseguró Infantino.
El presidente recordó que la «primera propuesta» para cambiar los calendarios surgió desde la Conmebol pero lamentó que «ahora cambió de idea». Infantino, titular de la FIFA desde 2016, remarcó que la Conmebol tiene asegurado los 18 partidos de clasificación a los Mundiales, que podrá organizar la Copa América «cada dos o cuatro» años y que el calendario también le permitirá jugar amistosos «fuera de Sudamérica».
Luego, Infantino se refirió al otro frente opositor que es la UEFA y sus 55 federaciones. «Quizás la UEFA está en contra porque no había visto los números económicos que hemos presentado hoy. Además, hemos modificado el calendario teniendo en cuenta el comentario de las asociaciones europeas que no querían jugar todo en un mes», explicó el suizo.
Infantino comentó que Europa domina el 70% de los ingresos de los seleccionados de todo el mundo. «Con nuestro propuesta, ese porcentaje se reducirá al 60% pero ese número será de dos mil millones (de dólares) más que el actual 70%», prometió Infantino.
«Se tiene en cuenta a todas las partes interesadas e invitamos a todos a intentar encontrar una solución común. Con las cifras que presentamos, todos se beneficiarán con la reforma», insistió.
La propuesta de la FIFA también tiene en cuenta que organizar la Copa del Mundo cada dos años podría aumentar en 80 mil millones de dólares el PBI mundial en un ciclo de 16 años y la creación de un millón de puestos de trabajo en todo el mundo.
Para el mandatario del fútbol mundial, este cambio es importante para retener la atención del público joven. «Si no queremos perderlos, tenemos que ofrecerles esto», afirmó.
La discusión seguirá en agenda pero Infantino ya advirtió que cuenta con los votos para aprobar su proyecto aunque tampoco pretende dejar a afuera a europeos y sudamericanos, los dominadores del palmarés de los Mundiales desde 1930.