Los últimos diez días de Lionel Messi conllevaron un trajín importante, generándole una sobrecarga muscular que casi deja a La Pulga fuera del exclusivo derby español por Copa del Rey ante Real Madrid, donde finalmente pasó inadvertido. Fuera de eso, tampoco tuvo descanso el fin de semana: no sólo jugó, si no que convirtió un nuevo gol para batir el record de anotaciones en partidos consecutivos por liga.
Consumada la fecha en España, Lio viajó a Estocolmo junto con Mascherano, donde fue recibido con alfombra roja y todo, pero no participó del primer entrenamiento del equipo ya que «la idea es no exponerlo a demasiado trajín. Recién acaba de llegar desde Barcelona y por eso se decidió que trabaje en el hotel».
También se quedaron los jugadores Fabricio Coloccini (Newcastle, Inglaterra), Pablo Zabaleta y Sergio Agüero (ambos de Manchester City, Inglaterra), Nicolás Gaitán y Ezequiel Garay (Benfica, Portugal) y Walter Montillo (Santos, Brasil), ya que todos llegaron esta tarde a Estocolmo.
El resto de los jugadores se dirigió hacia el estadio Friends Arena, bajo la supervisión del DT Sabella.
Los tres guardavallas citados, Sergio Romero (Sampdoria, Italia), Mariano Andújar (Catania, Italia) y Cristian Álvarez (Espanyol, España), efectuaron labores específicas para el puesto. En tanto, el resto del plantel trabajó en espacios reducidos sobre el césped del Friends Arena.
Con pechera naranja se alistaron Gonzalo Higuaín, Gino Peruzzi, Hugo Campagnaro, Angel Di María y Augusto Fernández. Con buzos de una tonalidad azul trabajaron Federico Fernández, Cristian Ansaldi, Fernando Gago, Franco Di Santo y Ezequiel Lavezzi.
En tanto, con una camiseta de color blanco se movió como una suerte de pivote Javier Mascherano.
Previamente al trabajo del seleccionado argentino se había entrenado el combinado sueco, a las órdenes del DT Erik Hamren.
Con Zlatan Ibrahimovic como principal figura, el representativo escandinavo ejecutó labores tácticas en espacios reducidos, ante más de 300 personas que poblaron un sector de una de las cabeceras y que, inclusive, colgaron banderas de aliento.
Pero la sorpresa de la jornada la dieron alrededor de 50 ó 60 hinchas del Galatasaray turco que vivaron intensamente a «su jugador», Johan Elmander, convocado por el técnico Hamren para el encuentro del miércoles ante la Argentina.
Fuente: El Gráfico