Sergio Varisco sostuvo que Paraná “tiene un gobierno ausente, soberbio y de escasa transparencia”. “La suma de voluntades comprometidas, por encima de procedencias políticas, se torna una actitud urgente que debemos tomar los dirigentes que asumimos la necesidad de volver a poner a la ciudad en el lugar digno y de grandeza en el que supo estar”, afirmó el precandidato a intendente por la UCR.
El radical exhortó a “dejar de lado mezquindades personales para avanzar en un gran acuerdo común que saque a la ciudad del atraso social, la desocupación y la crisis institucional grave que atraviesa”. “Eso, priorizando el valor humano de los ciudadanos en su conjunto y desterrando la soberbia de quien no sabe y cree saberlo todo y los padrinazgos indignos que terminan en fracasos estrepitosos, tal como lo demuestra la realidad de la actual gestión”, apuntó el ex presidente comunal capitalino, al detallar en declaraciones a la prensa “el serio colapso y los desmanejos que atraviesa la ciudad”.
Las declaraciones fueron hechas luego de mantener en los últimos días una intensa agenda de reuniones. De esta manera Varisco viene manteniendo encuentros con vecinos, distintas organizaciones intermedias, sindicatos y dirigentes políticos y del quehacer de la ciudad.
“Hoy más que nunca –sostuvo el dirigente– debemos ser conscientes y reconocer la real situación de la ciudad. Jamás Paraná estuvo tan mal, no solo en lo cotidiano, con servicios cada vez más deficientes; calles profundamente deterioradas; obras imprescindibles que nunca se hicieron – basta ver las miserias que dejo la lluvia reciente, que desnudó claramente cómo está abandonada y a qué nivel fue sometida la capital, sino también con un gobierno gravemente colapsado en lo institucional”, especificó.
Advirtió también que Paraná tiene “un gobierno ausente, soberbio y de escasa transparencia” y agregó que “no solo se ha fracasado en lo que a obras y servicios se refiere, cuyos resultados están a la vista de todos los paranaenses, también es alarmante los índices negativos a los que Paraná nunca en su historia llegó, por ejemplo la pobreza por falta de estímulos e inversiones en la ciudad ha crecido desmedidamente y la falta de trabajo la ubican como una de las ciudades con más desocupación del país, un coctel social peligroso cuando analizamos el porqué del crecimiento de la inseguridad y el deterioro de la calidad de vida”, apuntó.
“Por eso, vamos a profundizar los encuentros con distintos sectores, porque hay que dejar de lado pequeños egoísmos políticos partidarios y con franqueza ponernos a disposición de la ciudad y los paranaenses, por suerte esto está siendo entendido y asumido por la dirigencia, que comprende la necesidad urgente de sumar voluntades y dejar las discusiones, estériles para otros momento. Este es el momento de la ciudad – dijo, porque hay un hartazgo general”, señaló al convocar a la pluralidad de la dirigencia.
“Si miramos para otro lado o privilegiamos intereses personales, Paraná no tiene destino y habrán triunfado quienes hoy la someten a la decadencia social e institucional”, remarcó.