«En primer lugar les quiero agradecer a los miembros de la Comisión Directiva que confiaron en mí para presidir el cargo más importante para un racinguista. Espero no defraudarlos. Voy a poner todo el empeño para llevar a Racing Club al lugar donde merece llegar».
Víctor Blanco habló este lunes por la noche desde su nuevo sillón, como el sucesor de Gastón Cogorno. Lo hizo en una conferencia de prensa, desde un hotel porteño de su propiedad, donde se mostró gratificado y feliz por su nuevo desafío.
El flamanate presidente de Racing tendrá un año y dos meses para llevar las riendas del club hasta las próximas elecciones. «Vamos a trabajar para salir de este momento tan difícil, vamos a poner lo mejor de nosotros», prometió. «Hay que poner a Racing de pie y revertir los resultados» siguió quien también le agradeció a la oposición por no «haber hecho leña del árbol caído».
Blanco admitió que las peleas entre Cogorno y Molina influyeron negativamente en la salud de Racing. «Lo que pasó deber servir de aprendizaje. Esperemos que nunca más se repita», avisó el ex vice segundo, quien a su lado tenía sentados a representantes de los dos sectores que desencadenaron esta crisis. Sobre Cogorno agregó que «así como en las últimas 24 o 48 estaba enojado con su manera de proceder, este lunes cumplió con lo pautado».
«No era mi idea ser presidente de Racing, no porque no lo quisiera, sino porque no me lo había propuesto y porque no estaba preparado por mis tareas habituales», confió este hombre que nació en España y que es empresario.
Opinó Blanco que la interna institucional repercutió en el equipo. Y por eso este martes se juntará con Ischia y sus muchachos. «Queremos ver la problematica que existe y, además, brindarles seguridad y motivarlos para que vean que se terminó la interna».
«La parte deportiva es la mas difícil. En lo administrativo me tengo mucha confianza. Hay mucho para hacer, pero no es tan difícil. Lo deportivo no depende sólo de nosotros».